El Tour del 2006 se presenta con las mismas características, en cuanto a recorrido, que todos los años, pero con alguna diferencia notable.
Como siempre en Francia hacen un recorrido periférico al "hexagono". En la edición de este año se comienza en el norte, en Estrasburgo,con un prólogo de 7 kms, y tras un periplo por tierras del BENELUX, toma camino al este por Normandia y Bretaña. Como siempre una primera semana muy dura, con muchos nervios y miedo a las caidas y a las rotondas, siempre pasa algo la primera semana del Tour, aunque en apariencia, son etapas llanas y propicias para las llegadas masivas. Una característica de este Tour, y de esta primera semana, es que este año se prescinde de la CRE por equipos, modalidad vistosa en la que se deben y suelen marcar grandes diferencias de tiempos, pero que la organización del Tour se solía encargar de fastidiar con los porcentajes de diez segundos que perdía cada equipo. Este año han decidido no incluirla en el recorrido.
Finaliza esta primera semana de carrera con una crono individual de 52 kilometros, ideal para los grandes rodadores y corredores de mucha fuerza donde los ciclistas ligeros y escaladores puros lo pasarán mal, sobre todo si aparece el viento con mucha fuerza.
Pasado la primera jornada de descanso, comienza la segunda semanda de competición en Burdeos, en recorrido hasta Dax bordeando el Atlántico. En la etapa siguiente que comienza en el Pais Vasco-Francés, en Combo-les-Bains, vamos a tener el primer contacto con los Pirineos y con la alta montaña subiendo Soudet y el durísimo Marie Blanque, que aunque dista a muchos kilometros de la meta, seguro que veremos espectaculo con fugas lejanas y seguramente con alguno de los llamados favoritos pasandolo mal y olvidandose por completo de sus remotas posibilidades.
Seguimos el periplo pirenaico con un etapón que nos conduce hasta España en el Valle de Arán, una monumental etapa con ascensiones a Tourmalet, casi de salida por la vertiente de Luz Saint Sauver, para continuar con Aspin, Peyresourde, Portillon y la ascensión final a Pla de Beret. Veremos si los valientes dinamitan la carrera desde Tourmalet o Aspin o si por el contrario sufrimos del conservadurismo propio de la "era Armstrong" y no vemos el espectaculo propio que una etapa como esta debe deparar.
Dejamos los Pirineos, con dos etapas de transición camino de Carcassonne y Montélimar, para afrontar el domingo una ligera incursión en el Macizo Central (muy, muy ligera), en una etapa con final en Gap, y con el Col de la Sentinelle a sólo 8 kilometros de la línea de meta.
En la tercera semana, este año tocan los Alpes:
La primera parada en la cordillera alpina nos llevará hasta L'Alpe D'Huez, con ascensiones previas a Izoard y Lautaret, veremos aqui si ya hay un lider definido en la carrera que tenga un equipo capaz de controlar las fugas y los ataques o si por el contrario la trilogia de etapas alpinas ayudará a difinir la carrera.
La segunda etapa alpina nos llevará hasta La Toussuire, con el Galibier desde la salida, nada más y nada menos, 43 kilometros continuados de subida, sin el descanso, en esta ocasión, del Telégraphe, ya que se sube la otra vertiente, duro inicio de etapa para todos los corredores, no suele ser habitual ver un rosario de ciclistas en los primeros cincuenta kilómetros de etapa; en esta ocasión lo vermos. Nada mas terminar el descenso del Galibier, nos encontramos con otro Hors Categorie, la Croix de Fer, capaz de reventar al mas pintado; el Col du Mollard hace puente entre la Croix de Fer y el final de etapa en La Toussuire. Una etapa como esta, practicamente clavada, con los mismos puertos, pero con algún kilometro menos, la vimos en la edición de este año de la Dauphiné, donde los ciclistas españoles dieron un autentico recital, con victoria final para Iban Mayo.
La tercera etapa en los Alpes, nos conduce hasta Morzine, subiendo Saisies, Arabis, la Colombière, y la ascensión final a la pared del Joux-Plane, con bajada vertiginosa hasta Morzine, seguro que aun se acuerda de esta bajada Roberto Heras. Ésta puede ser una etapa preciosa a poco que las fuerzas y las ganas de los corredores se pongan a ello.
Como siempre en el Tour en la vispera del paseo triunfal en los Campos Eliseos, se suele disputar la segunda crono. La de este año de 57 kilometros en un recorrido de repechos y de gran dureza, donde tambien suele ocurrir que triunfen los más fuertes, sin necesidad de ser especialistas puros.
Recorrido muy equilibrado el de esta edición, donde quizás, los 109 kilómetros contra el crono, más los 7 del prólogo, pueden marcar diferencias a favor de los corredores más completos y contra los escaladores, aunque éstos tienen etapas y carreteras empinadas suficientes como para limar y no sólo eso, sino aumentar diferencias.
Nos espera un gran Tour. Ésto no lo pensaba yo desde el año 2000.