Una, dos, tres y hasta cuatro veces atacó Carlos Sastre en las rampas del Monte Petrano para poder alejar de su rueda a sus perseguidores, Basso, Di Luca y a un mas que nunca conservador Menchov.
Segunda etapa en la corsa rosa del equipo Cervélo, que podrían ser tres, consecutivas además, si la insensatez del director del equipo no hubiese parado al belga Pauwels en la etapa del domingo. Hacia tiempo que no veía a un director tan inepto.
La etapa de hoy, dura, quizás la mas dura de esta edición, estaba pasando desapercibida por lo de siempre: los corredores lo dejan todo para el último puerto. Si se hubiese movido mas la carrera entre los favoritos en el puerto previo, las diferencias hubiesen sido mas sustanciosas de lo que han sido, pero este es el ciclismo que nos toca vivir, y todo esto gracias a los otrora ciclistas poco dados a atacar: Carlos Sastre e Ivan Basso. Afortunadamente los antiguos compañeros en CSC han cambiado su forma de correr, ya que si tenemos que esperar a que el resto den un poco de espectáculo estamos apañados, sin los ataques del de Cervélo y el de Liquigas, los demás, como el domingo, le hacen la carrera a Menchov, para que éste, como le ha hecho hoy a Di Luca, que le ha llevado a rueda toda la subida, le quite las bonificaciones al final.
Y como pitoniso yo no tenía precio. Mi caballo ganador, Leipheimer se ha dejado medio Giro hoy. No me ha gustado nada la decisión, en primera instancia, de Armstrong, tirando para arriba, a su aire, intentando estar con los líderes, cuando el hombre fuerte de su equipo en la carrera se ha quedado atrás. Le han debido dar un toque desde el coche, ya que poco después ha esperado a Leipheimer y le ha hecho toda la subida. No me gusta nada esto de cara al Tour.
Mañana descansan los corredores, pero queda bastante carrera. Para empezar el miércoles, una de las etapas mas raras vistas en los últimos tiempos: Blockhaus, en una etapa, esta si que se puede llamar unipuerto: sólo 83 kilómetros.
A Carlos Sastre le vienen mejor las etapas como la de hoy, duras, pero seguro que lo va a volver a intentar para seguir restando tiempo a Menchov y a Di Luca. Si no es mañana, será el viernes en el Vesubio.