Alberto demuestra su poderio ante el gesto feo de Bruynnel

Alberto Contador ha vuelto a dejar claro quien es el corredor mas fuerte, física y psicológicamente, en el Tour de Francia. Físicamente ya lo demostró en la crono de Mónaco, en los dos kms finales de Ordino y de nuevo ayer con una exhibición absoluta en toda la subida. Y psicológicamente también lo ha venido demostrando, situandose un tanto aparte, de puertas afuera, de la polémica de su equipo, y demostrando su fortaleza, de puertas adentro. Como diría Don Quijote, ladran Sancho, luego cabalgamos.

Ayer en Verbier, Alberto estaba inquieto, le vino de lugo el ritmo que puso Saxo Bank al comienzo de la ascensión, y a la mínima metió un hachazo terrible, al que nadie pudo responder. Mientras tanto Bruynnel a lo suyo. En momento puntuales me pareció observar a Kloden bastante incómodo ante la situación creada: su compañero tirando por delante y él obligado a tirar por detrás, no solo de Armstrong, sino también de los demás que venían a rueda. El alemán cumplió las ordenes que le impusieron desde el coche, para algo es un profesional, pero a la mínima se dejaba caer al fondo del grupo, incluso al final pasó de Armstrong y le dejó en los doscientos últimos metros. No estaba cómodo en esa situación.

Ahora Bruynnel lo tiene claro, pero ya veremos como actúa. A poco que sea inteligente tiene que volcar todo el equipo en favor de Alberto. El belga sabe que Contador es el mejor ciclista para rondas de tres semanas del mundo, y que en sus piernas tiene varios Tours mas, y sabe que si sigue en ese apoyo poco lógico a Armstrong, Alberto se marchará de este equipo.